¡ALERTA! Factor de riesgo en CrossFit
“CrossFiters” tenemos una alerta bastante importante la cual quiero que conozcáis todos los que formamos esta ya poblada Comunidad. Sí, lo que estáis leyendo. ¡ Alerta !
Me acabo de hacer eco en el “BOX”, entre habladurías y comentarios de nuestros integrantes, de que está existiendo una nueva epidemia. Más bien lo podríamos describir como una gran avalancha. Como bien sabéis los ya iniciados y experimentados, estamos de acuerdo en que CrossFit es una combinación perfecta entre movimiento funcional e intérvalos de alta intensidad, mostrando énfasis en la técnica y/o ejecución del ejercicio y promoviendo la fuerza, resistencia, potencia, velocidad, flexibilidad y movilidad articular del practicante o atleta, entre otros muchos factores de desarrollo.
Hasta aquí todo bien, pero vamos a ir describiendo el factor de riesgo que anunciaba con anterioridad. Por favor, recordad el nombre de esta oleada porque está causando un especial impacto en nuestro admirado deporte.
Os presento a “la fiebre”. Lo confirmo, habéis leído correctamente. Esta epidemia es designada con el mencionado y conocido nombre que nos resulta a todos bastante familiar, ¿quién no ha pasado por un estado febril a lo largo de los años?. La fiebre es el aumento temporal en la temperatura de nuestro organismo a alguna enfermedad o padecimiento.
En este caso descubrimos otro tipo de ola, “la fiebre del CrossFit”.
Todo comienza con un montón de extraños encabezados y dirigidos por un ser especial que hacen elevar nuestra temperatura corporal. Esos extraños sudan contigo y mientras tanto, el ser especial te explica qué es un burpee y te ayuda a mejorar la técnica y ejecución de ciertos ejercicios que descubres que puedes hacer con tu, hasta ahora, desconocido cuerpo. A ese grupo de extraños los observas como sufren, están sufriendo contigo, muestran gritos de dolor y desahogo, de estar realizando un gran esfuerzo. Otra vez aparece la figura del ser especial, el cual está alentando, animando y pidiendo un último esfuerzo al grupo.
Con el paso del tiempo y después de compartir un puñado de entrenamientos, contemplas sin darte cuenta que has desarrollado un nuevo estilo de vida. Perteneces a un grupo social que te hace sentir querido, que te ha visto crecer y progresar, te han escuchado comentar que tú no eras capaz de hacerlo, que no podías acabar el WOD y te han acompañado en muchos de los peores de ellos. ¡Habéis compartido tanto en tan poco!
Los verdaderamente adictos, pueden tener síntomas de un trastorno obsesivo. Muchos de los que padecen de este trastorno también tienen una excesiva devoción por el trabajo que realizan y una extrema preocupación por los detalles y la perfección.
Podemos observar entonces que el CrossFit es capaz de hacernos creer en nosotros mismos y es capaz también de reavivar el asombro el cual ya pensábamos que habíamos olvidado. En definitiva, nos motiva e invita a descubrir todo lo que somos capaces de lograr.
Muchos son los que podrán comentar que tenemos una gran adicción y que estamos obsesionados, pero esto es lo que nos hace realmente felices, así que: ¿Qué más da lo que opine el resto?
Acabáis de descubrir el nuevo factor de riesgo, es “la fiebre del CrossFit”.